Twitter. Como ya señaláramos, ofrecemos un sistema de alertas a través de esta red social, con información de F&A y enlace a los medios originantes. La info, una vez procesada, se incorpora al Capítulo “Fusiones & Adquisiciones” de la Newsletter siguiente.
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Contexto. Tras negociar durante veinte años, la Unión Europea y el Mercosur alcanzaran un acuerdo de libre comercio, que engloba un mercado de casi 800 millones de personas. Primero el impacto, luego las dudas, y posteriormente entusiasmo y desesperación. Estas últimas algo exageradas ya que antes de regir plenamente, mucha agua pasará debajo del puente. Comenzando por la aprobación parlamentaria. Quienes peinan canas recordarán que, si bien en menor escala, algo parecido se vivió al constituirse el Mercosur. ¿Desaparecieron empresas? Desaparecieron. Pero no fue para tanto.

La tranquilidad de los mercados de acciones y bonos, que se mantiene, es condición para mejorar el ánimo del inversor inmobiliario. Y de ahí, a enterrar plata hay un solo paso. Primero en plantas ya existentes. Luego Greenfield (nuevas plantas). Finalizando en adquisición de compañías preexistentes. Pero es necesario que el país haga los deberes para que invertir en él resulte rentable. Por tanto, e independientemente del discurso de cada candidato, la oferta electoral real debería ser: sudor y lágrimas en cabeza nuestra, para dejar un país en serio a hijos y nietos. Es que quien asuma a fin de año enfrentará la alternativa del diablo: reforma estructural o el desierto. Por su parte, los cazadores de zoológico también deberán reconvertirse. Es que, después de un tiempo, solo se podrá cazar en la jungla. De noche. Están avisados.

Apéndice. La inversión extranjera despierta, pero sigue lejos de los niveles de países vecinos. Juan Busaniche escribió un interesante artículo (1) en el Portal cordobés Punto a Punto, que pasamos a condensar.

La atracción de Vaca Muerta. Funcionarios nacionales y referentes privados vinculados con los mercados energéticos no disimulan la euforia que despierta su explotación. Recientemente, Exxon Mobil confirmó el desembolso de US$ 2.000 millones para continuar la operación en esa reserva de petróleo y gas no convencional, en Neuquén. Según estimaciones de la Secretaría de Energía, Vaca Muerta captaría inversiones por US$ 10.000 millones este año.

Pero no alcanza. Aunque la foto es positiva, la película de las Inversiones Extranjeras Directas (IED) sigue a un ritmo lento y mira desde atrás las que captan países cercanos, en relación a sus PIB.

Leve repunte. La consultora DNI, que dirige Marcelo Elizondo, analizó la evolución de la IED en la región y en Argentina. En LATAM, la ingresada en 2018 alcanzó US$ 146.700 millones, cayendo 5,6% en relación a 2017. Brasil recibió, según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), US$ 61.600 millones, y continúa posicionado como primero en la región. En México, con una muy leve baja (-1.5%), la IED ingresada llegó a US$ 32.000 millones. La buena noticia para nuestro país es que, en un contexto de caída, es uno en los que crece, específicamente 5,6%. Los que registraron bajas son Brasil (-9,4%), Colombia (-20,4%) y fuertemente Bolivia. En la vereda opuesta,  crecieron en Chile (4,4%) y Ecuador (50%, por inversiones mineras).

Argentina. El aumento referido supone una recuperación parcial de la pérdida de participación de años anteriores, como efecto de los desequilibrios, desarreglos e irregularidades en el contexto económico y legal. Ha vuelto a ser el segundo principal receptor de IED en Sudamérica y el tercero en LATAM, con US$ 12.162 millones recibidos, alrededor del 8% del total regional, equivalente a su participación en el PIB latinoamericano. Los ingresos motorizados por Vaca Muerta explican un tercio del total, en tanto el resto fue reinversión de utilidades.

Flujo y stock. “No parece, sin embargo, un resultado extraordinario sino un regreso a participaciones proporcionales a su dimensión, luego de infra participaciones anteriores”. Aún cuando se mantiene debajo de sus vecinos (Brasil, México, Chile, Colombia y Perú) en el stock acumulado (acervo).

¿Quiénes son los ricos? Ahí puso el foco el Instituto de Desarrollo Social Argentino (IDESA), que analizó el estado del ‘matrimonio’ entre la IED y PIB medido en US$. Apoyado en estadísticas de la CEPAL, señala que el país, con  un PIB per cápita de US$ 9 mil dólares, sostiene un volumen de IED del 14% del PIB. Por contraste, en Chile el PIB pc es de US$ 15 mil y su acervo de IED llega al 92% del PIB. En la pequeña economía uruguaya, en tanto, el PIB pc es de US$ 17 mil y la relación IED/PIB es 79%.

Merecimientos. Para IDESA, son varios los motivos que lo explican. “En general, la IED tiende a incorporar mejores tecnologías y prácticas productivas que la inversión local. Pero lo más importante es que refleja cuan atractivo y amigable es el país para el desenvolvimiento de la actividad productiva, tanto nacional como extranjera. Que la Argentina tenga cinco veces menos IED que Chile y Uruguay es consecuencia del menor respeto por las reglas del capitalismo. En otras palabras, a peor calidad de las instituciones, menor progreso social”.

Y ahora, qué?  IDESA propone una serie de medidas para captar IED, al margen de los buenos números que muestra la inversión financiera especulativa. Es que, mientras en ésta prevalece el carácter especulativo buscando diferenciales de tasas de interés y tipos de cambios, en la IED hay compromisos de largo plazo que implican aportes de capital, préstamos inter compañías y/o reinversión de utilidades, ligadas directamente a la producción y creación de empleos. “De aquí la importancia de que el despertar de la confianza en Argentina se sostenga y profundice. Para lo que es imprescindible avanzar en el ordenamiento del Estado, que debe ofrecer infraestructura y servicios de calidad, regular correctamente los mercados y encontrar el equilibrio financiero para no generar inflación. Para ello es clave eliminar superposiciones de impuestos y acciones entre los tres niveles de gobierno, y recuperar la sustentabilidad y equidad del sistema previsional”.

En este número, en “Doctrina”, apreciarán el artículo del Dr. HÉCTOR BLAS TRILLO, graduado en la Facultad de Ciencias Económicas (UBA), con estudios de posgrado en Economía, Finanzas, Auditoría, Administración y Tributación, en el país y en el exterior. Es titular del Estudio que lleva su nombre. Escribe regularmente en numerosas publicaciones de Cámaras y Portales de Internet, y en medios de difusión masiva, como Revista Fortuna, Infobae, La Voz del Interior y la Gaceta de Tucumán.